EA Sports ha publicado un comunicado más extenso y actualizado en el que explica el escándalo #EAGate que ha sacudido a la comunidad de FIFA 21. Tal vez recuerdes que a principios de la semana, el editor dijo que estaba investigando afirmaciones en las redes sociales que parecían insinuar que un empleado había vendido algunas de las cartas más raras del modo Ultimate Team por 1.000 euros.
El editor ha dicho ahora que, como resultado de su investigación inicial, ha descubierto "una actividad cuestionable que involucra a un número muy pequeño de cuentas y artículos". El comunicado añade: "Aunque no se trata de un gran número, si estas acusaciones se demuestran, esta actividad es inaceptable. Queremos dar las gracias a los miembros de nuestra comprometida comunidad por llamar nuestra atención tan rápidamente sobre el asunto."
La compañía continúa diciendo que "parece que una o más cuentas de EA, que estaban comprometidas o que estaban siendo usadas de forma inapropiada por alguien dentro de EA, dieron derecho directamente a artículos a cuentas individuales". Aunque subraya que ahora está llevando a cabo una investigación rigurosa, señala que "tomaremos medidas contra cualquier empleado que se descubra que ha estado participando en esta actividad" si resulta ser cierto.
Por el momento, ha desactivado de forma indefinida la concesión discrecional de contenidos, que es una función que el editor utiliza principalmente con fines de servicio al cliente, por ejemplo, si un error técnico provoca la pérdida de una tarjeta concreta. También ha dicho que prohibirá las cuentas que supuestamente hayan comprado las tarjetas con dinero real.
Es un asunto importante, y parece que EA Sports se lo está tomando en serio. Por supuesto, no tiene otra opción: esto socava gravemente la integridad de todo el ecosistema del juego y, legalmente, podría poner a la organización en serios aprietos.
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14/03/2021